Crónica del primer ensayo

Ayer domingo 14 tuvimos nuestro primer ensayo. La verdad es que, rompiendo con nuestra sacrosanta tradición, el asunto se tomó bastante en serio. El personal llegó más o menos a la hora y el ensayo comenzó media hora más tarde de lo previsto, pero ya se sabe no se puede pedir peras al olmo.

En resumidas cuentas los nuevos bailes y ritmos no salieron del todo mal, claro está teniendo en cuenta que era el primer ensayo oficial. Eso si, desde aquí pido un apoyo para los cencerros, a los pobres casi no se les oye.

Otros cotilleos:

• Me encontré a Chelo, la jefa de los panderos, algo compungida. Cuando la pregunté por su penar, me comentó que estaba muy triste por que nadie la había dicho que cogiera una de las nuevas panderetitas, por cierto cómo suenan las jodidas. No se que voy a hacer este año si mi eterna compañera. No te preocupes corazón que yo te guardo un sitio a mi lado en la fila panderil.
• Empezamos los ensayos con roturas: Rubén se cargó el parche del bombo. sin comentarios. Una de las nuevas baritas triples para las nuevas panderetas no pudo terminar sana el ensayo. Poco a poco fue pérdiendo piezas, primero le saltó una al Sera, luego otra a un chico que se estrena en los panderos (el caso es que ahora no me acuerdo como se llama, perdón por mi mala memoria) que finalmente términó tocando con una varita sin empuñadura. ¿Qué desastre así no tenemos perras para el estandarte.

Bueno queridos vendavalnautas por hoy os dejo, ya seguimos otro día.

Un saludo del reportero vendavalero.

Arturo